Cualquier proyecto de virtualización/digitalización debe ir acompañado de un soporte para definir qué tecnologías deberían ir asociadas al mismo. Esto exige distinguir dos partes claramente diferenciadas: la arquitectura de datos y las aplicaciones o programas informáticos que trabajan con ellos.
¿Capturar datos y almacenarlos es digitalizar? Evidentemente, no. Detras de ellos debe existir un modelo lógico abstracto que permita saber cómo están estructurados y qué son. Para ello la tecnología utiliza esquemas de contenido y metadatos para organizarlos. Los esquemas están tutelados por organizaciones que los evolucionan y perfeccionan constatemente. A la combinación de los datos, junto con los modelos que los organizan y los metadatos que los definen se le puede dar el nombre de arquitectura de datos. Una buena arquitectura de datos es sinónimo de eficiencia y control en la base de un proyecto.
Si la arquitectura de datos es importante, puede decirse que las aplicaciones o programas que los almacenan, organizan y modifican están sujetas a un extenso conjunto de variables. La existencia de diferentes tipos de infraestructuras informáticas, la multiplicidad de los lenguajes de programación, los variados modelos de negocio que concurren en cualquier proyecto de digitalización obligan a definir las aplicaciones como una parte del proyecto variable y sujeta a modificaciones: las aplicaciones son la parte de usar y tirar.
Si el cliente lo precisa podemos implantar soluciones en diferentes lenguajes. Entre ellos se cuentan: C#, PERL, Python, Java, Javascript. Trabajamos con las tecnologías de bases de datos Oracle, MSSQL, mySQL.
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